8 años después: Varias ideas falsas de la cultura con Esteban Krotz
Esteban Durán Fonseca
Jamás creí que ocho años después leería con temor las entradas de mi antiguo blog creado en el 2014 para escribir reseñas de películas nominadas al Oscar. Recuerdo que ese año fue una locura para los Premios de la Academia: estaban en juego películas como "12 Years a Slave" de Steve McQueen hasta "Blue Jasmine" de Woody Allen. Eran momentos emocionantes que, además, hacían ruptura a un conjunto de tradiciones dentro de la gala.
Sin embargo, como nada está exento de cambiar, mi yo actual, en el 2021 ya no ve los los Oscars y tampoco sigue a Ellen DeGeneres en twitter. Es más, no tengo cuenta en twitter. Esto me hace reflexionar un poco junto con la lectura de Esteban Krotz y mi existencialismo. Hace ocho años, tal vez, ya conocía otras dimensiones del cine, pero sin duda, tenía ideas muy erradas sobre la cultura, mi papel como consumidor y las mismas barreras que yo fortalecería como espectador y receptor de esta industria.
Lupita Nyong'o, el hermano de Lupita Nyong'o y el resto de hiperfamosos blancos. |
8 años después, me encuentro en el blog que había titulado "Cine, libros y algo más" un conjunto de reseñas que exaltan estos proyectos cual si fueran obras maestras inolvidables, lo cual, no está tan lejos de la realidad: son inolvidables, pero no por eso obras maestras. Mi desvelo por escribir sobre ellas, admito, denota lo redimido que alguna vez fui a esta industria exacerbante que se mete en las ideas. En las reseñas se encontrarán un conjunto de adjetivos que solamente las pudo escribir un yo genuino, que no encontraba crítica frente a la gala de los Premios Oscar. Que no comprendía aún la connotación política de este escenario.
Sin intenciones de comenzar una diatriba contra estos premios, lo que apunto fue que mi interés por este tipo de industria resultó producto de mi involuntariedad. Respondí básicamente a todo este proceso que involucraba comercializar estándares de belleza, discursos supremacistas blancos, reproduje la banalidad, la evasión y poca criticidad de esta premiación tan famosa.
Lupita Nyong'o ganadora del premio a mejor actriz de reparto y Cate Blanchett ganadora del premio mejor actriz en el 2014. El vocalista de 30 Seconds to Mars y el galán de las comedias románticas. |
Leyendo a Esteban Krotz, me entero cómo reproduje más de las 5 ideas falsas sobre cultura que expone en el artículo. Vamos a ver...
Para empezar, este tipo de expresión genera comparaciones con otras industrias de cine, generando en el espectador carente de crítica e información, idolatría en estas figuras públicas. Preguntándose o asumiendo así, quién posee o no cultura. Menciona Krotz que:
"A cierto tipo de
educación y a estos bienes culturales suele
tener acceso siempre sólo un pequeño
segmento poblacional, mientras que los
demás quedan excluidos" (pág 14)
Por eso, es posible que nuestras limitaciones nos hagan observarles a estos grupos de poder ejercer la ilusión de ser mayores exponentes culturales que otras manifestaciones mundiales. Teniendo escuelas importantes de cine que constantemente, además, también premian sus producciones. (Chequear esta lista en wikipedia: https://es.wikipedia.org/wiki/Cine_de_Am%C3%A9rica_Latina)
Seguidamente, la cultura que consumimos nos hace preguntar si hay una jerarquía entre culturas. Así, vemos cómo este tipo de premiación y las bases de marketing que utilizan solo hacen fortalecer las malas ideas coloniales que hasta el día de hoy siguen vigentes en nuestra vida. La jerarquía entre culturas carece de argumentos objetivos o científicos. Es estratificación social.
"No hay nada que indique que la cultura del maíz
sea mejor o peor que la del trigo o del arroz,
que la forma musical del "lied" valga más
que la del "son", que los libros de "ciencia
ficción" sean esencialmente inferiores a las
obras literarias del realismo decimonónico" (pág. 14).
Los Oscars transmiten imágenes que nos recuerdan alguna vez hubo el sostén de creer que hay culturas puras o mezcladas. Esteban Krotz menciona sobre esto que:
“Lo que sucede es que quienes reflexionan
sobre una cultura o tratan de transmitirla a
otra generación o de distinguirla de otras
culturas, siempre están en la tentación de
presentarla como un todo integrado, como
algo completamente propio y concluido en
sí mismo. Por tanto, suelen perder de vista
el carácter de mezcla de todas las culturas” (pág. 16)
Steve McQueen y su elenco celebrando eufóricamente el triunfo de "12 Years a Slave" como mejor película en el año 2014. |